Elegir baldosas para el dormitorio permite combinar comodidad, practicidad y estilo. La habitación dedicada al descanso, espacio íntimo por excelencia, no puede renunciar a la estética: el gres porcelánico se revela como la elección ideal desde este punto de vista, y por mucho más. Además de las excelentes prestaciones estéticas de los distintos efectos (madera, piedra, mármol, cemento y metal), capaces de crear superficies cálidas, acogedoras y naturales, las prestaciones técnicas del gres porcelánico convierten el dormitorio en un entorno saludable. De hecho, la cerámica es inhóspita para las bacterias, los hongos, el moho y los ácaros; no libera sustancias nocivas y es inerte: no arde y menos aún emite humos tóxicos.