Los estilos cambian, al igual que la forma de concebir y habitar los espacios del hogar, y el baño, como el resto de la casa, reclama una personalidad propia, transformándose en una estancia para amueblar. Desde esta perspectiva, nuestras colecciones cerámicas ofrecen herramientas realmente inspiradoras. Basta pensar, por un lado, en los elementos decorativos que las completan, y por otro, en la posibilidad de combinar varios estilos estéticos, como piedra y madera, madera y cemento, o mármol y cemento.
Otra manera de crear un baño actual con gres porcelánico es revestir las paredes (excepto la ducha, claro) hasta una cierta altura, por ejemplo 120 cm. Muchas colecciones, por sus formatos disponibles, lo permiten. Por encima de esa altura, queda espacio para cuadros, fotos y estanterías para colocar productos de cuidado personal y pequeños toques creativos.
Si os gustan los baños con baldosas grandes, elegid un efecto disponible en losas finas. Con tamaños que alcanzan los 160x320 cm, podréis integrar en el diseño no solo el suelo y las paredes, sino también el plato de ducha y el lavabo. Como superficie arquitectónica universal, el gres porcelánico fino puede utilizarse para revestir muebles, estanterías, encimeras e incluso puertas y frentes de armario.